¿Crees que tus insultos son originales?…

claricelecter@hotmail.com

#MostroVacci

La mente humana es un concepto muy interesante, tanto así que se han escrito libro tras libro sobre su complejidad y dificultad para entenderla; volúmenes de enciclopedias y olas de gente que la estudia han aparecido a través de los años para ver si podemos hacer mella en la vasta complejidad que se contiene dentro de sus esquemas y sin embargo, la mayor parte de ella es un misterio.

Definitivamente hay aspectos que se nos escapan por completo. MI ignorancia siempre me ha causado gracia, por lo mismo, mi natural curiosidad siempre se niega a darse por vencido, por más frustrado que pueda estar para encontrar las respuestas que a veces busco. Nunca soy tímido a la hora de preguntarle a la gente qué es lo que pasa por en medio de sus orejas, sin embargo, no todos tienen la habilidad de externar lo que sienten de manera fluida. No cabe duda que los talentos varían de persona en persona.

Por ejemplo, algo que siempre me ha llamado la atención de la conducta humana es la discriminación. Creo que todos hemos caído en ella, tiene mucho qué ver con nuestra cultura, ya que nos enseñan constantemente que la piel morena es menos agradable que la blanca, ¡y eso que lo he escuchado más de gente morena que nada! Recuerdo que mi ex, un chico moreno oscuro se tomaba las fotos en diferentes ángulos con tal de verse más claro porque cuando su color natural salí ene la foto se quejaba de que se miraba bien prieto, y luego se enojaba porque yo le decía que así estaba. Era la verdad. En lo personal la gente morena se me hace hermosa, tanto así que mi pareja es de piel morena y se me hace la criatura más hermosa que he conocido. Y que conste que no le digo mi negrito ni algún apodo ofensivo referente a su color de piel. Detesto eso de insultarse como cariñito. Se me hace pasivo agresivo y lo detesto.

La que me ha tenido pensando últimamente son los insultos por ser gay. Siempre son los mismos y el mismo tipo de persona. Como si decirme una variación de mi orientación sexual no me haya pasado miles de veces. Son insultos que escucho cotidianamente, ¿qué te hace sentirte tan original? Es más, ¿qúé te hace sentir que diciendo lo obvio me voy a ofender? Es como si te miro y te digo que eres una persona ignorante, retrógrada, patética y poco original y te ofendes. Solo estoy diciendo lo evidente. Digo, si me vas a insultar, de perdida ten un poco de creatividad y di algo nuevo, algo que no he escuchado durante casi cuarenta años.

Eso de preguntarme quién es el hombre y quién es la mujer en mi relación, más que hacerme sentir incómodo, me dan ganas de decirle a la gente que si gusta le muestro en persona. Eso definitivamente los incomoda más. Cuando me hacen preguntar personales e íntimas siempre les pregunto algo parecido y me río cuando el color se les va a la cara y empiezan a decirme que eso es algo que no me importa, ¿ah verdad? No es lo mismo que te pregunten intimidades cuando te las das de muy santurrona.

Me han preguntado que de dónde saco lo ocurrente. Al parecer mi creatividad, mientras no sea dirigida hacia ellos, es maravillosa. Esa pregunta se me hace tan absurda, ¿de dónde lo saco? Tengo treinta y nueva años siendo insultado, discriminado, hecho menos, ofendido, atacado, deshumanizado, juzgado, amenazado y sentenciado al infierno por todo tipo de gente, desde la más irrelevante hasta la más cercana, claro que he aprendido a defenderme del mundo. Dicen que uno habla de cómo le fue en la feria, y les aseguro que esos que somos buenos para regresarle su mala energía a la gente es porque hemos tenido qué aprender a vivir con ella. Yo como reina vieja lucho constantemente contra la negatividad y los estereotipo, contra los ataques externos e internos hacia mi existencia y mis prácticas sexuales privadas.

Así que lanza tu veneno, serpiente, si eso es lo que te hace grande, descarga tus grandes cantidades de odio, no es nada nuevo para mí. Es evidente que siempre has tratado de destruir mi mente y mi espíritu porque es la única forma que te sientes poderosa, sin embargo, tendrás que vivir con la perpetua frustración de saber que nunca, nunca tendrás éxito porque todo lo que me escupes como ofensa me ha fuerte, imparable y sobre todo, no ha contaminado mi alga para odiar como tú lo haces.

Mi mejor arma es la indiferencia. He aprendido a no ponerle peso emocional a lo que me dice la gente y así, no tiene valor alguno lo que me dicen. Tomo lo que llega de quien viene y si alguien que amo me lastima, simplemente los dejo ir. No dramas, no reclamos, solo mi silencia y ya no vuelven a saber de mí. Al final de cuentas, cuando me ven en un futuro, me reclaman que ya no los busco, que ando muy alejado, que ya no esto y lo otro. Yo. Al parecer nunca se imaginan que algo que hicieron causó que yo pusiera esa distancia.

Entonces, corolario: si vas a atacar hazlo original. Sé creativo y no vengas con lo mismo que me han dicho desde que tengo siete años, porque más que lastimarme, se me hace aburrido. Mejor enfoca tu tiempo y energía en ser mejor persona en vez de atacar a esas que no son como tú.

Traigamos algo bueno al mundo, veneno ya tiene mucho…

Y ustedes hermanos, hermanas, ¿qué opinan? Compartan… si se atreven…

Saludos afectuosos.

Mostro.

Deja una respuesta